Bienvenidas
El objetivo de este blog es explicaros quien soy, por qué surgió Beyond Psychology, y qué es exactamente lo que hacemos y cómo lo hacemos.
Pero para mí, lo más importante, es haceros saber, las ganas, la ilusión y el amor con el que he realizado este proyecto, que tiene como objetivo principal, ayudar a la mayor cantidad de seres humanos a tener una vida plena y feliz, donde la salud, la paz y el amor sean los componentes principales de la vida tan maravillosa que tienen la suerte de vivir.
¿Qué es Beyond Psychology?
Beyond Psychology es el resultado de muchos años de búsqueda e investigación alrededor del mundo, con el objetivo de desarrollar un modelo de tratamiento para la salud emocional y física de la mujer, que permita al paciente alcanzar la verdadera sanación. Un tratamiento multidisciplinar, en el que se contempla al ser humano como una globalidad donde se busca el equilibrio entre la mente el cuerpo y el espíritu.
Mi objetivo siempre ha sido claro, convertirme en la terapeuta que siempre quise para mí.
La historia de Beyond Psychology
No me canso de contarla una y otra vez, y es que, aunque un poco triste, he de reconocer que gracias a ella, me he convertido en la terapeuta que soy a día de hoy.
A mi corta edad de 12 añitos, tras la separación de mis padres, fui diagnosticada con bulimia, trastorno bipolar y no sé cuántas etiquetas más. Desde el primer día, mi tratamiento consistió en charlas y medicación, las únicas herramientas con las que se trabajaba la enfermedad mental allá por los años 90. Pasaba el tiempo y no solo no mejoraba, sino que me iba adentrando en una pubertad llena de dolor, miedo, incertidumbre y una inconmensurable falta de amor propio.
Recuerdo todavía como si fuera ayer, cuando al empezar con otro psiquiatra, con otra medicación, mirar al médico con esos ojitos completamente desvalidos y con las mismas lágrimas que aparecen ahora mientras escribo, y preguntarle, ¿pero me vais a curar por favor? Es que dinero todavía me queda, pero lo que ya casi no tengo es esperanza. Jamás olvidaré la desesperación con la que lo pegunté. Jamás dudé tampoco de las ganas de los terapeutas de ayudarme. Yo era consciente de que ellos hacían todo lo que podían o sabían pero charlar una hora a la semana y tomar medicación, en mi caso, nunca fue suficiente.
Pasaban los años y yo cada vez estaba peor, hasta que un día, me rendí, dejé de creer que me podría curar, tiré la toalla y como consecuencia de ello, casi pierdo la vida.
Como dice el refrán, lo que no te mata, te hace más fuerte, y efectivamente así fue, decidí que encontraría la cura para mí, y para quienes estuviesen en mi situación, supe que encontraría otras opciones para todas aquellas personas que, como yo, sufrían en silencio la desolación la angustia y la vergüenza, de convivir con una enfermedad mental que a priori no tenía solución. Así que otro día cualquiera, dejé mi vida atrás, mi exitosa carrera como fisioterapeuta, mi balneario, mi casa, mi familia, los amigos. Me lancé a lo que por entonces ni sabía, sería la mayor experiencia de mi vida, lo que proyecté para un año, se convirtió en un proyecto de 13 años donde viajé y estudié alrededor de América, Asia y Oceanía para desarrollar el modelo de tratamiento que a día de hoy ofrezco en mis consultas de Sydney y Mallorca.
¿Cómo lo hacemos?
Tras muchos años de investigación, siendo yo la primera en experimentar los beneficios del programa de intervención que con el tiempo fui desarrollando, pudimos por fin establecer las dos fases fundamentales para el proceso de sanación.
Fase 1: Equilibrio, aprendizaje y cambio de vida:
En esta primera fase, instauraremos pautas en nuestro estilo de vida, que nos permita estar en Paz, eliminaremos traumas, bloqueos físicos, emocionales y energéticos y aprenderemos a reconocer y gestionar nuestras emociones.
Fase 2: Derivación, apoyo y revisión:
Una vez en equilibrio, y tus nuevas pautas y estilo de vida se han instaurado correctamente, si algún problema persiste, te derivaremos al profesional que necesites con el que trabajaremos de forma multidisciplinar
¿En qué me he especializado?
Si hay algo que ha regido mi carrera y mis ganas de aprender y ser cada vez mejor, es el respeto infinito por el paciente que decide depositar su salud en mis manos.
Siempre he dicho que, bajo mi punto de vista, la especialización es la clave, ya que por más que uno quiera, y créeme que yo quiero, no se puede tener la maestría en todo. Por otro lado, también pienso firmemente, que haber vivido en primera persona el problema físico o emocional de la persona que viene a tu consulta, multiplica por 1000 tu capacidad de entender, empatizar y ayudar al paciente en su delicado proceso de sanación. Por ello, decidí especializarme en mujeres, y en los problemas en los que sé que por experiencia propia puedo ayudar a solucionar.